El Ayuntamiento de Calvià acordó en el último pleno rendir un homenaje póstumo a los dos jóvenes guardias civiles asesinados en el brutal atentado perpetrado por la banda terrorista el pasado 30 de julio en Palmanova. Por unanimidad de todos los grupos municipales, la sesión acordó, por un lado, otorgar a título póstumo las medallas de oro de Calvià a Carlos Sáenz de Tejada García y a Diego Salvà Lezaun, así como designar dos calles del municipio con sus nombres.

Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvà perdieron su bien más preciado, su vida, en acto de servicio. La banda terrorista les privó de un futuro brillante y lleno de éxitos y dejó a sus familiares, amigos y compañeros del Instituto Armado completamente desolados. Ahora, el Ayuntamiento de Calvià, como muestra de su más sentido agradecimiento por su labor y dedicación en el municipio, y porque siempre están y estarán presentes en el pensamiento de todos, acordó ayer poner el nombre de Diego Salvà Lezaun a la actual calle na Boira, el lugar donde se hallan ubicadas las dependencias de la Guardia Civil frente a las que se cometió el atroz asesinato y rotular con el nombre de Carlos Sáenz de Tejada al vial, hasta ahora sin nombre, que une l'Avinguda Pedro Vaquer y l'Avinguda de l'Olivera, vial también muy próximo al lugar donde se cometió el atentado.

Y en el mismo pleno, el Grupo Municipal del Partido Popular presentó también una moción instando al Ministerio del Interior a que tome las medidas necesarias para que las obras de construcción del nuevo cuartel de la Guardia Civil en Son Bugadelles se reanuden de inmediato y continúen hasta su finalización en los plazos del contrato adjudicado. Las obras cuentan con la preceptiva licencia municipal y no existe ningún motivo para que dichas obras estén paralizadas. Las dependencias del cuartel de la Guardia Civil de Palmanova tienen más de 40 años, cuando la población del municipio era de 3.579 habitantes frente a los 52.801 que se registran en la actualidad, cifra que se eleva a más de 200.000 personas en plena temporada estival.

Y es que para el equipo de gobierno de Carlos Delgado, es prioritario garantizar la seguridad de los guardias civiles que día a día velan por todos los vecinos y, prueba de ello, son las múltiples actuaciones realizadas por el Ayuntamiento en los últimos años. En noviembre de 2005, el Ayuntamiento les cedió de manera temporal y gratuita, hasta que finalizaran las obras de la nueva casa cuartel, unas oficinas municipales ubicadas en la calle Na Boira, dada la precariedad de las instalaciones del antiguo cuartel y su falta de espacio, apenas de 60 metros cuadrados para los 172 agentes adscritos al mismo. Posteriormente, en 2006, el Ayuntamiento destinó 40.000 euros en adecentar el antiguo cuartel, se hizo nueva toda la tabiquería interior, la instalación eléctrica y se pintaron las oficinas.

El pasado 17 de septiembre, y en la misma línea de colaboración que siempre ha tenido con el Instituto Armado, el alcalde Carlos Delgado anunció su intención de ceder temporalmente y de forma gratuita a la Guardia Civil las dependencias ubicadas en el Intercambiador Central de Transportes, al entender que es prioritario garantizar una mayor seguridad de los agentes que desarrollan su trabajo en Calvià. Próximamente, los agentes que se encuentran en las oficinas de la calle Na Boira se trasladarán al Intercambiador, para lo que ha sido necesario reubicar el departamento municipal de Medio Ambiente, que ocupaba estas instalaciones.