El consistorio adquiere el compromiso de una estrategia de lucha contra el cambio climático que ya viene desarrollando desde el año 2007 cuando se creó la Oficina Calvià por el Clima.

El Ayuntamiento de Calvià ha aprobado por unanimidad adherirse al Pacto de los Alcaldes, que supone, entre otras cosas, superar el objetivo de la Unión Europea de reducir en un 20 % las emisiones de CO2 antes de 2020. En el denominado Pacto de los Alcaldes participan las autoridades locales y regionales que han asumido el compromiso voluntario de mejorar la eficiencia energética y utilizar fuentes de energía renovable en sus territorios.

El consistorio calvianer, en este sentido, ya lleva tiempo trabajando en la estrategia contra el cambio climático y en 2007 se creó la Oficina Calvià por el Clima. Ese mismo año ya se adhirió a la Red Española de Ciudades por el Clima dependiente de la FEMP (Federación Española de municipios y provincias), un organismo cuyo objetivo fundamental es establecer las actuaciones más necesarias y efectivas en la lucha contra el cambio climático y el apoyo a un desarrollo sostenible en todo el país.

La adhesión al Pacto por los Alcaldes de la UE tan sólo supone, de esta manera, dar un paso más y establecer un compromiso común con Europa en un trabajo que este municipio ha establecido como uno de los objetivos prioritarios de su política en estos últimos años, una política que ha sido reconocida a nivel nacional e Internacional ya que, de hecho, se invitó al Ayuntamiento el año pasado al CONAMA (Congreso Nacional de Medio Ambiente) y, hace dos, a la cumbre de Copenhague donde, por cierto, Calvià fue el único municipio al que se solicitó su presencia dada la gran labor que se estaba desarrollando a través de la mencionada oficina.

Por su buen hacer, el Ayuntamiento ha sido galardonado con una mención especial en los premios Ciudad Sostenible de la Fundación Fórum Ambiental que ha valorado, los siguientes puntos:

  • La estrategia medioambiental planteada y ratificada sobre el papel y con hechos de cara a los próximos años, en concreto hasta 2015.

Y dos proyectos específicos, como son:

  • El proyecto de eficiencia energética del alumbrado público, a través del cual el Ayuntamiento paga, a día de hoy, 325 mil euros menos de los que abonaba en la factura anual de 2005 y emite 2000 toneladas menos de CO2 a la atmósfera.
  • La instalación de calderas de biomasa en las piscinas cubiertas de Peguera y Santa Ponça que suponen un ahorro de 33.000 euros en la factura de cada instalación y dejar de emitir 250 toneladas de CO2 a la atmósfera.